sábado, mayo 12, 2012

De ‘hueso colorado’


Viniendo de una familia calderonista de ‘hueso colorado’, puro ‘mariachi’, con un padre trabajador de la construcción, ferroviario y pintor sindicalizado durante los años 40s, me ha sido siempre extraño que algunos me liguen al liberacionismo histórico y al PLN.

Mi primer recuerdo de una campaña electoral es del año 1961, cuando mi familia ondeaba banderas azules y apoyaba a Ulate. Quizás lo recuerdo, dado que tenía tan solo 8 años, por la consigna que se gritaba: “vote azul, cague verde”, muy llamativa para una mente infantil…  Por supuesto que estuve en el Paseo Colón con toda mi familia incluyendo a mis tías y docenas de primos en el recibimiento a Calderón Guardia, en los hombros de mi padre a ratos y asombrado por la multitud inmensa.

Años después, en mi bicicleta andaba el letrero “yo no”, de la campaña opositora a la primera candidatura de Oduber, pues su consigna principal era "yo también voy con él, con Daniel" (campaña que este perdería en 1966), y a quien mi padre había servido como pintor de su casa y quien le llamaba a mi padre ‘mariachón’, pero con respeto y simpatía.  Luego, ya adolescente, colaboré en la campaña de Echandi, en 1969 y que don Mario perdió frente a don Pepe, y como guía en un transporte el día de la campaña, pero principalmente porque una jovencita, que me gustaba mucho, también estaría participando y era una oportunidad para estar algo cerca, aunque sin esperanza alguna…

Vinieron luego los tiempos del Movimiento Nacional de Juventudes y del movimiento estudiantil en la UCR y la militancia en FAENA y el FPC; lo que me alejaba muchísimo más de cualquier vínculo con el PLN y más bien, ponía a sus miembros y dirigentes en la acera del frente.

No fue sino por una larga relación de amistad, desde los tiempos del movimiento estudiantil y de FAENA y de ALTERNATIVAS, que apoyé, en la campaña del PLN de 1993, a quien fuera finalmente Vicepresidenta y  que luego colaboré con Rebeca, como su asesor  (dejando la cátedra universitaria) durante la administración de Figueres. Así pude conocer mucha gente y trabajar estrechamente con ellos y hacer muchos amigos (y otros tantos no tan ‘amigos’) vinculados al PLN, antes de volver a mi cátedra en la universidad y no volver a participar en  ninguna otra campaña electoral con ningún partido político, limitándome estrictamente a votar, desde 1994 a hoy.

Y aunque para alguna gente soy un ‘perico de alas verdes’, a mí siempre me resulta extraño, algo lejano a mi experiencia y herencia familiar y mi padre ‘mariachón’.