martes, septiembre 20, 2005

PLANEAMIENTO AMBIENTAL FRENTE AL RIESGO IMPUESTO

Planeamiento ambiental frente al riesgo impuesto

La investigación científico técnica en el mundo actual y la revolución en la infocomunicación de las últimas dos décadas permite generar conocimiento en tiempo real y modelar las situaciones esperadas en función de las situaciones locales -como las precipitaciones estacionales o las áreas de inundación consuetudinaria-, lo mismo que en relación con fenómenos globales como el cambio climático y el calentamiento global.

El riesgo que se ha impuesto a pueblos, comunidades rurales y barriadas urbanas debe identificarse con el detalle científico y la exactitud que dan instrumentos como la construcción de escenarios de riesgo local, que permite integrar variables y perspectivas de los cambios ambientales con la información y perspectivas de los pobladores y la capacidad local, municipal o institucional.

Las instituciones científicas nacionales con su amplia experiencia y vínculo con redes internacionales del más alto nivel técnico están produciendo información básica que debe ser utilizada en la construcción de tales escenarios, más bien sociales y políticos, de manera que se promuevan, comprometan y presionen –de ser necesario- las inversiones requeridas para desarrollar las acciones para disminuir el riesgo que se ha impuesto a las comunidades rurales pobres y las ya enormes barriadas urbanas que se inundan o son arrasadas un día sí y otro también.

El concepto de riesgo, como expectativa probable de daños y pérdidas, ha derivado hacia un concepto más peligroso: riesgo aceptado. Este último supone un conocimiento de las consecuencias a sufrir por la realización del riesgo que se vislumbra y es un elemento que permite entender criterios de inversión que utilizan las aseguradoras o empresarios que construyen en sitios de altísimo riesgo pero a sabiendas de que podrían tener ganancias extraordinarias por las rentas de localización. No obstante, este tipo de cálculo no lo hacen los pobladores ni los campesinos, quienes residen en orillas de quebradas o en zonas de inundación y no tienen otro sitio para vivir ni escape posible por falta de medios –salud, edad, costos, etc.- A ellos el riesgo se les impone como un elemento más de sus precarias condiciones de vida. Es riesgo socialmente y políticamente impuesto, no aceptado o casual.

El abuso y destrucción de las condiciones ambientales, los desequilibrios excesivos, el crecimiento económico y la inversión depredadora se dan cada vez más a escalas globales y se vienen acumulando progresivamente desde el inicio de la sociedad industrial. El riesgo que ello genera tiene como sustrato condiciones ambientales donde lo local expresa cambios globales muy significativos; cambios que se puede ahora medir en detalle y así lo hacen los científicos y las instituciones meteorológicas, geológicas y ambientalistas. En términos sociales y políticos es un riesgo impuesto a escala global para todos los habitantes del planeta. Es ya conocida la manera en que el calentamiento global y otros fenómenos atmosféricos implican cambios específicos en los pueblitos de las costas o en ciudades construidas en inmensos humedales, lo que se une a la intervención de dimensiones regionales o locales en sitios donde la construcción de diques, represas y drenajes han alterado enormes extensiones de costa que se erosionan sin solución, como también lo hacen las montañas y las llanuras aluviales con la agricultura extensiva, contaminante y destructiva de los bosques.

La investigación científica hidro meteorológica, tectónica y geológica es un aspecto central de la explicación necesaria para entender la forma en que se presentan los fenómenos globales en las condiciones locales, las condiciones tropicales de Costa Rica por ejemplo; pero a ellos se requiere integrar la investigación técnica constructiva y agrícola, las formas de habitar o construir ciudades y la explicación del proceso de ordenamiento social del uso del territorio. Todo lo cual es todavía insuficiente sin la dimensión política e ideológica que permite entender la orientación general del Estado y las formas concretas de ejecutarse políticas sociales o económicas que no solo dan un marco general y corresponden con el proceso global, sino que se expresan también en las acciones preventivas, de mitigación o de emergencias. Como conjunto, estos enfoques integrados de una situación particular permitirán construir (para impulsar su planeamiento futuro) los escenarios locales y regionales del riesgo, no aquel que aceptan los inversionistas y que estarían dispuestas a pagar las aseguradoras, sino aquel impuesto a los pobladores medios, a los habitantes en general, pero que de seguro presentará distintos niveles en función de su acceso relativo (entre otras, por razones de discriminación de etnia, de género, de edad, de nacionalidad, etc.) a los bienes materiales, los territorios y, en último término, la vida.


Manuel Argüello-Rodríguez, Ph.D.
Catedrático de la UNA (Costa Rica)
-5 de septiembre de 2005-

debate en riesgo

Millones de blogs y uno más ahora sobre el tema de riesgo de desastres, su creación, su proceso, su gestión, los responsables de su concresión en forma de desastres locales, regionales o globales; como el que el deshielo y el calentamiento global estarían progresivamente generando en cientos de ciudades costeras y miles de millones de habitantes del planeta, por ejemplo alrededor del Océano Pacífico. Pero la prensa y los grandes comunicadores siguen hablando de cómo Rita, Katrina y Ofelia "arremeten con furia", "desatan su violencia destructiva", "provocan la pérdida de miles de vidas", etc. Con ello se disfraza de "natural" aquello que un modo particular de organizar la producción y la sociedad ha ido generando en forma progresiva y callada, sin distracciones. Un modo de organización social basado en la obtención de ganancias a corto plazo ocultando bajo la alfombra la basura que se genera y la destrucción de procesos naturales ambientales. Ese proceso callado o hecho callar aparece de pronto como destrucción y entonces el 'se los dije' salta y las excusas aparecen y las responsabilidades políticas se evaden. El rescate heroico y la masiva movilización de apoyo caritativo llena las pantallas y los informes de prensa y se discute quizás la eficacia del operativo de rescate y emergencia; pero se deja atrás y se desconoce u oculta el proceso que generó el desastre y sus responsables.